Dr. José Alberto Tursi

GOLPE DE CALOR… ¿quién, cuándo y cómo cuidarse?


Comienza diciembre, llega el verano y con él las altas temperaturas, las cuales cada vez son más intensas. Las mismas pueden generar el llamado “golpe de calor” que es una consecuencia, a veces grave del exceso de calor. Un “golpe de calor” es la elevación de la temperatura corporal por encima de lo normal (entre 39,4 y 41*C) y por períodos de 15 a 20 minutos. Órganos sensibles como el cerebro o el riñón pueden alterar su funcionamiento a estas temperaturas.


Síntomas

Los más importantes son los siguientes: mareos, confusión, sudoración excesiva al comienzo, luego puede faltar el sudor, enrojecimiento y sequedad de la piel, fiebre, desorientación, comportamiento inadecuado, taquicardia con latido débil, cefalea, inconsciencia, convulsiones y coma.


Causas 

– Exceso de calor, especialmente si hay mucha humedad.

– Beber poco, la transpiración es necesaria para eliminar el calor corporal, para transpirar en forma adecuada debemos tener el cuerpo bien hidratado, beber agua u otros líquidos es la forma de asegurar éste mecanismo.

– La deshidratación, falta de líquidos en el organismo producido por excesiva sudoración, sin el aporte de líquidos adecuados, o ciertas enfermedades como diarrea, vómitos, diabetes no controlada, etc.


¿Cómo actuar ante un “golpe de calor”?

– Poner a la persona en un sitio fresco y a la sombra, es conveniente ponerle los pies en una posición elevada.

– Llamar por teléfono a emergencias.

– Mover a la persona afectada si es posible a un lugar con aire acondicionado o ventilador.

– Con temperaturas mayores a 40*C, bañar a la persona con agua fría hasta llegar a los 38*C y  dejar de aplicar frío para evitar las hipotermias.

– Controlar la temperatura por momentos para evaluar cuando volver a realizar medios fríos.


Consejos para evitar un golpe de calor 
o insolación

– Beber mucho líquido, para evitar la deshidratación, al menos dos litros diarios.

– Evitar hacer ejercicios en las horas de mayor calor, es más conveniente hacerlo por la mañana o la tarde.

– Vestir con ropa ligera, y fresca, proteger la cabeza adecuadamente.

– Comer comidas ligeras, no beber alcohol ni excitantes, evitar grasas y comidas calientes, preferir frutas, verduras, ensaladas.

– Descansar de tanto en tanto si realiza trabajo o ejercicio físico duro.

– Aclimatarse gradualmente al calor.

 

No dejemos de disfrutar del sol, pero no olvidemos de utilizar el factor solar adecuado y la hidratación suficiente.

Dr. José Alberto Tursi